Algo que aprendí en el semestre pasado y a través de la vida
y en la que coincido con el libro, es que en lugar de ver nuestros defectos y
tratar de esconderlos, lo que debemos de hacer es descubrir los talentos que tenemos y los que ya
sabemos que tenemos potencializarlos. Lo mismo buscan las empresas. No obstante creo que es
importante intentar cambiar los defectos que tenemos; siempre decimos que es
imposible que alguien cambie, pero eso no quita que podamos intentarlo.
La mayoría de los seres humanos estamos acostumbrados a que
como clientes y contratando a un consultor, en la mayoría de los casos, las
cosas resulten prácticas y rápidas, obviamente con excelentes resultados, lo
típico te enfermas, vas al doctor, te dan tu diagnóstico, tu receta y listo en
cuestión de días curados!!!!, en las empresas no es tan simple ni es el mismo
enfoque.
“No
todo lo que brilla es oro”, es decir muchas veces cuando estamos dentro
de la empresa, y creemos conocerla, también creemos saber cuáles son exactamente
los problemas o deficiencias que tenemos dentro de esta. Pero al ser consultor
y ver las cosas de una manera externa la visión de esos problemas o
deficiencias cambia, enfocas diferente las situación, la solución y la
realidad. Bueno y dentro del ejemplo del libro si concuerdo con que en la
actualidad los jóvenes quieren mucho en muy poco tiempo. Es una cuestión que
también he notado en la realidad de las empresas mexicanas, y obviamente
también en el gobierno. Otro punto que
toca es cómo se maneja el problema, como mencionábamos en clase muchas veces lo
emocional se mezcla.
Ya que estamos tocando lo emocional, comentábamos de tomar
las cosas personales, creo que esto es simple, aquí juagan dos factores la
inteligencia emocional y de quien provenga el comentario. Mi frase “lo que no aporta estorba”
es simple, una persona que sólo te critica y juzga y no es parte o aporta una
solución, no suma nada a tu vida, es decir estorba. En cambio me he dado cuenta
que en la mayoría de los problemas la gente llega y te dice, hay ya la regué,
ok soy el jefe tomo decisiones y generó soluciones, pero que pasaría si la
gente llegara con una cultura de: Sabe que jefa, la regué en esto, porque hice
esto, pero tengo estas opciones para solucionarlo, o podemos hacerlo así, la
mayoría pretende que otros limpien las porquerías que han hecho. Y el tomarlo
personal va en cuestión de que permites que te afecte, algo que me enseño mi
papá, es que nosotros somos los que permitimos que los comentarios o acciones que
van dirigidas a nosotros nos afecten; más simple, nosotros permitimos enojarnos, reírnos, llorar, reír,
etc. Si permites que te afecte un comentario de alguien que ni siquiera conoces
bien se vuelve personal. No es fácil decidir porque en todo momento estas
involucrado, pero hay que saber escoger quien y que vale la pena y quien no.
Los invito a que nos tomemos unos
minutos para reflexionar y ver que podemos potencializar de nosotros que nos
hace diferente a los demás. Y que constantemente intentemos darle importancia lo que lo
tiene y sino dejarlo
ir!!!! No todo es personal, aunque algunas cosas sí; fijarnos no sólo en
lo que nos digan sino también en como lo hacemos nosotros!!!! Eso es lo
difícil, hay que vernos
primero nosotros y luego juzgar a los demás, aunque muchos digamos que
es por nuestro bien!
Como tú comentaste en la clase y ahora en tu blog, que aprendiste de tu Papá unos recursos y dichos que te han servido para no tomar las cosas como algo personal. Ahora has añadido que la responsablidad está nuestras manos. Estoy de acuerdo.
ResponderEliminarHola Carolina, muchas gracias por tu aportaciones.
ResponderEliminarGracias a tu narrativa me hizo reflexionar en varios puntos que abordas en esta, el vernos a nosotros mismos, el hacer introspección, la autocritica y pienso que en estos procesos debemos ¡¡¡¡¡¡¡ ser gentiles con nosotros mismos ¡¡¡¡¡¡¡.
Saludos y linda noche. MMR
El hacerte participe externo de conocimiento reflexionado permite la facilidad en conductas congruentes
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